Muy bien, ya estábamos en Ticino. Pero habíamos comprobado que Iragna y Lodrino iban pasados, y Osogna bajaba crecido y marrón. ¿Qué hacer? Después de hojear la guía de los Nizzola, nos pareció que el Malvaglia u Orino inferior (v4a4III) era una buena opción: si en estas fechas acostumbra a ir algo bajo, después de las lluvias del fin de semana, y en vista de los caudales de los demás barrancos, debía ir muy bien... Al poco de empezar la aproximación, al cruzar por el Ponte Laù -punto de checkpoint del caudal- y ver bajo nuestros pies la primera cascada, comprobamos que iba alto. Perfecto.
Aproximación: Partiendo de Biasca y entrando en la población de Malvaglia por la carretera, tomaremos el desvío a Malvaglia Chiesa, y al poco giraremos a la izquierda por una especie de carretera secundaria. Siguiendo recto, llegaremos a un puente que cruza el barranco poco después de su final. Aparcaremos aquí nuestro primer coche donde no moleste, y con el segundo retrocederemos unos ciento cincuenta metros, para tomar a la izquierda una carretera en dirección a Val Malvaglia y Pontirone. Siguiéndola trazaremos varias curvas en zigzag; en la segunda curva pronunciada a la derecha, veremos a la izquierda unas escaleras y un poste indicador con la indicación "Sentiero Val Malvaglia - Ponte Laù". Aparcaremos donde podamos el segundo coche y tomaremos a pie este sendero, que lleva al inicio del barranco en 15 minutos.
El descenso empieza con varios destrepes que nos conducen enseguida a las dos primeras cascadas, de 18 y 24 metros, situadas bajo el Ponte Laù. Mucho caudal en ambas, siendo la trayectoria de la segunda más delicada. Buenas sensaciones...
A continuación nos esperan varios toboganes o saltos de hasta ocho metros, y el tercer rápel del descenso: 18 metros de recorrido, la mitad final de los mismos por el agua. La guía dice que este rápel puede saltarse, pero no lo probamos...
Tras una breve zona abierta intermedia, llegamos a un estrechamiento delicado con caudal, con dos rápeles de 10 (cruce de vena) y 24 metros.
Ya estamos en la parte final del descenso, una bonita cascada de unos 75 metros fraccionada en dos rápeles de 40 y 38 metros. Ambos se realizan por fuera del agua, por lo que no hay mayor problema que la incomodidad de la segunda reunión.
Después de recoger las cuerdas, unos minutos de progresión nos conducen bajo el puente junto al que se deja el primer coche.
Finalizamos el descenso con la sensación de haber empezado realmente bien nuestro viaje. El barranco es resbaladizo pero bonito y deportivo, con esa combinación
de grandes caudales, pozas profundas y verticalidad que tienen muchos barrancos de la zona.
Atención: para realizar cualquiera de los dos tramos del Malvaglia es obligatorio llamar previamente a la empresa hidroeléctrica Ofible y comunicar la intención de adentrarse en ellos. Si nos dan el visto bueno, una vez finalizado el descenso debe llamarse nuevamente para comunicar la salida (teléfono +41 91 756 66 15).
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